Irán reveló un nuevo vehículo aéreo no tripulado (UAV) llamado "Gaza", afirmando que puede transportar hasta 13 bombas y está equipado con un motor de turbojet que supuestamente puede propulsarlo a distancias que superan los miles de kilómetros, poniendo a Israel al alcance de la nueva tecnología.
El nuevo UAV es una versión mejorada del modelo Shahed 129, que fue presentado por primera vez en septiembre de 2012. Se asemeja al UAV israelí Hermes 450 pero es más grande.
Fuentes iraníes estiman que el UAV puede transportar más de ocho bombas y está diseñado para atacar tanto a objetivos móviles como estacionarios. Capaz de transportar misiles "Sadid-1", el nuevo instrumento de guerra de Irán se convierte en su segundo UAV capaz de tal capacidad de misiles, después del "Karar".
Irán promocionando su arsenal militar
Desde la eliminación de las restricciones de la ONU sobre las exportaciones de misiles y UAV de Irán en octubre, Teherán ha estado promocionando cada vez más su arsenal militar a nivel internacional, lo que aumenta las preocupaciones entre Estados Unidos y sus aliados. Teherán ha estado suministrando armas a sus aliados en Medio Oriente durante años para apoyar sus actividades.
Armamento iraní también jugó un papel en la confrontación indirecta entre Irán y los Estados Unidos, incluido el asesinato de tres miembros del servicio estadounidense en un ataque con UAV en enero en Jordania por una milicia iraquí apoyada por Teherán.
Los recientes acuerdos de defensa iraní incluyen un acuerdo para vender misiles balísticos de corto alcance a Moscú, según fuentes estadounidenses, y la transferencia de UAV suicidas al gobierno sudanés.
"La calidad es mediocre, pero es la mitad del precio", dijo un funcionario sudanés de alto rango al comparar el nuevo UAV iraní con sus competidores.
"Estoy muy impresionado con sus tecnologías de misiles de alcance medio", dijo un oficial de la fuerza aérea catarí de alto rango.
El nuevo UAV de Irán representa un esfuerzo por superar al MQ-9 Reaper fabricado en Estados Unidos, que en 2020 se utilizó para eliminar a Qasem Soleimani.
El personal del Jerusalem Post contribuyó a este informe.