Desde el comienzo de la epidemia de COVID-19 hace cuatro años, el número de niños en todo el mundo con TDAH ha aumentado considerablemente. Muchos profesores, padres y médicos han hablado de que los niños tienen dificultades para establecer contacto visual, están inmersos en las pantallas y pierden la capacidad de prestar atención durante periodos de tiempo más largos.
Un nuevo estudio israelí pretendía averiguar si se ha producido un aumento en la prevalencia de este trastorno y, en caso afirmativo, si está relacionado con el coronavirus.
El estudio, que se presentó en la Conferencia de la Asociación de Pediatría de Israel celebrada el miércoles en Tel Aviv, fue dirigido por el doctor Nitzan Shahar, de la Universidad de Tel Aviv, el doctor Vered Shekalim Zemer y la profesora Iris Manor, especialista en psiquiatría infantil del Clalit. Los investigadores recopilaron datos sobre tres millones de casos de niños de entre 6 y 18 años de la base de datos electrónica de los Servicios de Salud Clalit y examinaron la tasa de diagnósticos antes, durante y después de la epidemia de Corona.
Los datos no muestran correlación
En los datos se recogió información sobre grupos de edad, sexo, estatus socioeconómico y fechas de diagnóstico del TDAH. Los investigadores descubrieron que la epidemia de coronavirus no tuvo ningún efecto sobre tasas de diagnósticos de TDAH y que no hubo cambios significativos en el número de diagnósticos durante la epidemia.
El estudio explicaba que la teoría de que el coronavirus causa el TDAH puede afectar negativamente a los niños que realmente tienen TDAH, ya que pueden no ser diagnosticados, pensando que sus síntomas se debían al virus y no al trastorno del neurodesarrollo en sí.
"El rumor de que el coronavirus causa el trastorno por déficit de atención circula desde hace varios años", explica la profesora Iris Menor. Sin embargo, a partir de toda la información recogida en la literatura médica mundial y de nuestra investigación, no encontramos diferencias en la tasa de trastorno por déficit de atención antes y después de la epidemia." El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo con un base genética y neurológica, no una respuesta a una infección vírica."
Entonces, ¿cuál podría ser la causa de la disminución de la capacidad de atención en niños y adolescentes?
Según el profesor Manor, puede ser la exposición a las pantallas y a los medios sociales lo que provoca daños en el desarrollo que pueden afectar a la capacidad de escucha."
"Los niños de ahora rara vez establecen contacto visual, se expresan con emojis, apenas leen libros y están expuestos a vídeos en Tiktok e Instagram que duran unos segundos."
"Todo esto puede erosionar su capacidad de mantener la atención durante largos periodos de tiempo y su necesidad de estimulación inmediata. Sin embargo, no se trata de un trastorno médico de la atención, que comienza en la infancia y continúa a lo largo de la vida. De cualquier forma, la recomendación es que cualquier padre que tenga dudas acuda a un especialista para que le diagnostique", añadió.