Descubren evidencia de un noveno planeta en nuestro sistema solar

Un noveno planeta podría estar oculto en nuestro sistema solar. Descubre aquí detalles de la nueva evidencia que podría cambiar todo lo que sabemos.

 Júpiter e Io.  (photo credit: NASA Hubble is licensed under CC BY 2.0. Via Flickr)
Júpiter e Io.
(photo credit: NASA Hubble is licensed under CC BY 2.0. Via Flickr)

Un equipo de investigadores cree haber encontrado la evidencia más convincente hasta la fecha de la existencia de un planeta oculto, que podría ser el Planeta Nueve. Según un estudio reciente, este planeta, posiblemente ubicado en el Cinturón de Kuiper, es pequeño, con una masa entre 1.5 y 3 veces la de la Tierra. "Podría ser una Tierra helada y rocosa, o un super-Plutón. Debido a su gran masa, podría tener una gran energía interna que podría sostener, por ejemplo, océanos subterráneos. Su órbita sería muy distante, mucho más allá de Neptuno y mucho más inclinada en comparación con los planetas conocidos", dijo Patryk Sofia Lykawka, profesora asociada de Ciencias Planetarias en la Universidad Kindai en Japón y coautora del estudio, según El Tiempo.

Otros investigadores, como Konstantin Batygin y Michael Brown, argumentan que un planeta invisible varias veces más grande que la Tierra podría estar "pastoreando" objetos más pequeños en el sistema solar. Batygin y Brown, firmes defensores de que el Planeta Nueve existe, han estado trabajando en la búsqueda del Planeta Nueve desde 2014, realizando simulaciones por computadora para probar sus teorías en contra de la presencia del planeta oculto. Teorizan que su atracción gravitacional, un objeto "super-Tierra" con alrededor de cinco a siete veces la masa de la Tierra, podría estar alterando las trayectorias de cuerpos distantes en el Cinturón de Kuiper. Michael Brown sugirió que el Planeta Nueve podría ser significativamente más grande, posiblemente diez veces su masa.

La posible existencia del Planeta Nueve ganó tracción científica por primera vez en 2016 cuando Brown y Batygin propusieron que un planeta invisible podría explicar las órbitas inusuales de ciertos objetos del Cinturón de Kuiper, generando controversias y varias teorías opuestas. Se inspiraron en un estudio del astrónomo Scott Sheppard, quien, junto con Chadwick Trujillo, notó por primera vez que las órbitas de varios objetos transneptunianos conocidos estaban extrañamente agrupadas.

"Desde que Neptuno fue descubierto con éxito en 1846, al menos 30 astrónomos han propuesto la existencia de varios tipos de objetos transneptunianos y siempre han estado equivocados", dijo Batygin, un profesor de Ciencias Planetarias en el Instituto de Tecnología de California, según El Tiempo.

Durante más de una década, los científicos han estado buscando planetas ocultos en el Cinturón de Kuiper, centrándose en anomalías gravitacionales peculiares y patrones orbitales inusuales. La influencia de un objeto masivo no visto, conocido como "atracción gravitacional del planeta", es sugerida por las anomalías gravitacionales observadas en las órbitas de los cuerpos distantes. Los astrónomos esperan que estos patrones orbitales inusuales eventualmente conduzcan a la ubicación precisa del Planeta Nueve.

Los avances en la tecnología de telescopios y en el análisis de datos han proporcionado a los científicos más herramientas para investigar el misterio del Planeta Nueve. Con los crecientes avances en la tecnología de observación y las colaboraciones en todo el mundo, los científicos son optimistas acerca de encontrar el Planeta Nueve. Solo hasta finales de 2025, el nuevo telescopio de la NASA, capaz de explorar todo el cielo nocturno, determinará si existe o no un nuevo planeta. A medida que nuevos telescopios se pongan en línea y los datos se acumulen, investigadores como Michael Brown y Konstantin Batygin creen que una respuesta definitiva podría surgir en la próxima década.

Este artículo fue escrito en colaboración con la empresa de inteligencia artificial generativa Alchemiq