La tasa de mortalidad de los trabajadores humanitarios en Gaza es peor que en otras guerras recientes, dijo el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en un comunicado que publicó lamentando la muerte de siete trabajadores humanitarios de World Central Kitchen durante un ataque aéreo de las FDI.
"Estoy indignado y desconsolado por las muertes de" los trabajadores humanitarios, en Gaza, incluido un estadounidense", dijo Biden en un comunicado emitido por la Casa Blanca anoche.
"Estaban proporcionando alimentos a civiles hambrientos en medio de una guerra. Fueron valientes y desinteresados. Sus muertes son una tragedia", dijo.
"Aún más trágicamente, esto no es un incidente aislado", declaró Biden.
Israel ha asumido la responsabilidad del ataque y se ha comprometido a llevar a cabo una investigación independiente y transparente.
"Esa investigación debe ser rápida, debe exigir responsabilidad y sus conclusiones deben hacerse públicas", dijo Biden.
Sin embargo, señaló que la muerte de estos trabajadores humanitarios no fue un incidente aislado en la guerra entre Israel y Hamas que comenzó el 7 de octubre. Según las Naciones Unidas, 196 trabajadores humanitarios han sido asesinados, la mayoría de los cuales eran miembros del personal de la ONU.
La guerra entre Israel y Hamas, dijo Biden, "ha sido una de las peores en la memoria reciente en cuanto a la cantidad de trabajadores humanitarios asesinados".
Desafíos de distribuir ayuda humanitaria
"Esta es una de las principales razones por las que ha sido tan difícil distribuir ayuda humanitaria en Gaza, porque Israel no ha hecho lo suficiente para proteger a los trabajadores humanitarios que intentan entregar ayuda desesperadamente necesaria a los civiles. Incidentes como el de ayer simplemente no deberían suceder. Israel tampoco ha hecho lo suficiente para proteger a los civiles. Estados Unidos ha instado repetidamente a Israel a desconflictuar sus operaciones militares contra Hamas con las operaciones humanitarias, para evitar víctimas civiles".
Sus palabras llegan en un momento en que Israel y Estados Unidos han estado en desacuerdo sobre la próxima operación militar de Israel en Rafah, donde se encuentran más de 1.3 millones de palestinos.
Los funcionarios estadounidenses están preocupados de que el plan de Israel no haga lo suficiente para garantizar la protección de los civiles palestinos y han argumentado que las FDI deberían llevar a cabo ataques selectivos para destruir a Hamas en Rafah, en lugar de una operación militar a gran escala.
"Estados Unidos continuará haciendo todo lo posible para entregar asistencia humanitaria a los civiles palestinos en Gaza, a través de todos los medios disponibles. Seguiré presionando a Israel para que facilite esa ayuda", dijo Biden.
Destacó que Estados Unidos está "presionando fuerte por un alto el fuego inmediato como parte de un acuerdo de rehenes. Tengo un equipo en El Cairo trabajando en esto en este momento."
Biden dijo que habló con el fundador de WCK, el chef José Andrés, para expresar sus condolencias y "apoyo continuo a sus incansables y heroicos esfuerzos para llevar comida a las personas hambrientas alrededor del mundo".