El miércoles, el Ministro de Asuntos Exteriores Palestino, Riyad al-Maliki, dijo que no esperaba "milagros" en las conversaciones en Moscú para discutir la formación de un gobierno palestino unificado y la reconstrucción de Gaza.
Las conversaciones entre representantes de Hamas y la facción política Fatah, programadas para tener lugar en la capital rusa el jueves, vienen días después de que el Primer Ministro Palestino, Mohammad Shtayyeh, renunciara.
El cambio, según Maliki, fue diseñado para construir apoyo para un papel ampliado de la Autoridad Palestina tras la guerra de Israel contra el grupo terrorista islamista Hamas en Gaza.
"Esperamos que allí, podamos tener buenos resultados en términos de entendimiento mutuo entre todas las facciones sobre la necesidad de apoyar a un gobierno tecnocrático que emergerá", dijo Maliki de las conversaciones.
“Por supuesto, no esperamos que ocurran milagros en una simple reunión en Moscú, pero creo que la reunión en Moscú debe ser seguida por otras reuniones en la región pronto.”
La ineficacia de la Autoridad Palestina
La Autoridad Palestina, creada hace unos 30 años como parte de los acuerdos de paz interinos de Oslo, ha sido debilitada por acusaciones de ineficacia y por tener un primer ministro con poco poder efectivo.
La renuncia de Shtayyeh marca un cambio simbólico que subraya el deseo del presidente Mahmoud Abbas de asegurar que la Autoridad mantenga su reivindicación de liderazgo a medida que crece la presión internacional para reactivar los esfuerzos para crear un estado palestino.
Maliki, quien hablaba al margen del Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, dijo que la dimisión del gobierno se había diseñado para evitar que los socios internacionales dijeran que la Autoridad no estaba colaborando.
"Queremos mostrar nuestra disposición... para comprometernos y estar listos, solo para no ser vistos como un obstáculo en la implementación de cualquier proceso que deba llevarse adelante", dijo.
Maliki también acusó al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas de "fracasar" al pueblo palestino en su incapacidad de acordar un alto el fuego, haciéndose eco de los comentarios del jefe de la ONU, Antonio Guterres, quien dijo que la autoridad del cuerpo había sido "quizás fatalmente" socavada por su falta de unidad en el tema.
"Ahora en Gaza, parece que el alto el fuego es un objetivo lejano a alcanzar", dijo Maliki. "Como resultado, vemos gente muriendo."