El escorpión amarillo brasileño, o por su nombre científico Tityus serrulatus, está considerado el escorpión más venenoso de Sudamérica.
Colombia, España y una empresa de salvamento estadounidense reclaman la propiedad del naufragio, apodado el "Santo Grial de los naufragios", y su carga.
El presidente Gabriel Boric le dijo a la nación en un discurso televisado: "La situación es realmente muy difícil".