Hezbolá afirmó, a través de medios iraníes, que había "lanzado una lluvia de cohetes contra varias posiciones militares israelíes en respuesta al asesinato de uno de sus comandantes en Líbano".
Hezbolá afirma haber disparado más de 200 cohetes y 20 drones en el norte de Israel, tanto en Galilea como en los Altos del Golán.
Las sirenas sonaron la mañana del sábado mientras se interceptaban oleadas de objetivos aéreos sospechosos provenientes de Líbano.
Nasrallah hizo hincapié en los logros de Irán contra Israel, mientras que el primer ministro Mikati abordó las tensiones y la guerra psicológica en medio de incidentes de cohetes y UAV.
El director de la oficina de medios del gobierno dirigido por Hamas en Gaza informó a Reuters que los ataques israelíes en distritos de la Ciudad de Gaza habían matado a 42 personas.
Según una organización siria de derechos humanos con sede en el Reino Unido, se ha informado de la muerte de una persona.
Abdollahian dijo que Irán no atacó ciudades como Haifa o Tel Aviv porque sus "líneas rojas" eran los civiles; el objetivo era militar.