Los textos médicos de hace 2.500 años rara vez mencionan la pérdida severa de memoria, lo que sugiere que la demencia generalizada de hoy en día se origina en los entornos y estilos de vida modernos.
El equipo investigó enfermedades metabólicas en animales de compañía y se propuso identificar probióticos adecuados para un tratamiento seguro y a largo plazo.